Según los galenos, el cáncer de próstata es el tumor que más se diagnostica entre los hombres, señalan que afecta a más de 50% de los hombres cuando cumplen 70 años a nivel mundial. Si bien es cierto, sí el cáncer se detecta en una etapa temprana, cuando solo afecta a la glándula prostática, tiene grandes probabilidades de superarse con el tratamiento adecuado, vigilado por un especialista.
Además, es importante señalar que ciertos pacientes que presentan cáncer de próstata no siempre muestran síntomas en sus primeras etapas. Sin embargo, existen casos que pueden producir síntomas, entre los cuales se destacan:
- Dificultad al orinar, dolor o ardor mientras se orina.
- Disminución del flujo de la orina y dificultad para vaciar la vejiga por completo.
- Aumento de la frecuencia miccional, especialmente por las noches.
- Molestias o dolor en la zona pélvica.
- Presencia de sangre en la orina o en el semen.
- Disfunción eréctil.
- Dolor de huesos.
Generalmente, el cáncer de próstata va creciendo de forma paulatina, por ello, la detección precoz es la mejor arma para combatirlo. Ya que la próstata es una glándula pequeña del tamaño de una nuez, el cual produce líquido que ayuda a los espermatozoides a nadar. La glándula también controla el flujo de orina y cuando aumenta su tamaño se denomina hiperplasia benigna prostática.
Los médicos indican que una señal de que un hombre puede ser portador de cáncer de próstata es que sus hábitos para ir al baño han cambiado; puede que le resulte más difícil orinar, que tenga un chorro más débil o que se levante con frecuencia durante la noche para ir al baño.
Por ello, hacer algunos cambios en su vida puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar la enfermedad:
Come sano: Llene su plato con frutas, verduras, cereales integrales y carnes magras, aves o pescado. Los galenos sugieren comer más pescado, tomate, coliflor y brócoli para reducir el riesgo.
Reduzca el consumo de calcio: Es recomendable limitarse a consumir alimentos y bebidas que contienen calcio, como leche, helado, yogur, queso y sardinas.
Evite las vitaminas: No tome vitaminas o suplemento adicionales, la vitamina E es una vitamina que podría aumentar el riesgo de cáncer de próstata, según el Instituto Nacional del Cáncer (NCI).
Haz más ejercicio: Caminar, practicar deportes y otras actividades lo ayudan a mantenerse más saludable en general y pueden reducir su riesgo de cáncer de próstata.
Perder peso: El sobrepeso puede aumentar sus probabilidades de contraer cáncer de próstata. Llevar una dieta saludable y mantenerse activo puede ayudarlo a perder el exceso de peso.
Ten más relaciones sexuales: Los especialistas recomiendan tener relaciones sexuales o masturbarse con frecuencia, ya que ayuda a que aquella glándula trabaje de forma adecuada.
Además, hay fitofármacos como Sawlife que es el primer tratamiento natural para la prevención y tratamiento de la hiperplasia prostática benigna. Ya que su tratamiento natural, a diferencia de los químicos, no produce impotencia ni efectos secundarios.
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